Temas de Integridad
el 3 de Noviembre de 2004
“Use el sentido común,
maneje con precaución”
Pregunta: (E-149)
Tengo 16 años, y los adultos me confunden. En
ciertas carreteras y autopistas, como usted sabe, el
límite de velocidad es 65 millas por hora. Cuando
mi padre maneja a esa velocidad, le pitan y le gritan.
Los conductores simplemente lo rebasan. A veces el maneja
a 72 millas por hora (En las zonas de 65 millas por hora)
y los oficiales de policía lo rebasan, sin poner
atención a la velocidad. ¿Quién
tiene el problema de integridad: Mi papá, los
otros conductores o la policía?
Respuesta:
Los señalamientos del límite de velocidad
proveen los requerimientos legales para conducir, y son
aplicables por esos oficiales que no han detenido a tu
padre en el pasado.
Ojalá no hayan tenido que responder a algún
llamado de emergencia que no requería encender
las luces y la sirena.
Cuando los oficiales son asignados a responder con prontitud,
no tienen tiempo de hacer las infracciones de rutina.
De cualquier forma, y para que quede claro, con base
en mi conversación con un oficial de policía,
tu debes ser prudente y manejar al límite o por
debajo del límite de velocidad que establecen
los señalamientos, no de vez en cuando, sino todo
el tiempo.
Técnicamente, 65 millas por hora es el límite
legal en muchas autopistas, pero, debido a algunas circunstancias
relacionadas con el tiempo, patrones de tráfico
y seguridad, otros factores pueden reducir el límite
de velocidad seguro.
En otras palabras: "Usa
el sentido común,
sin importar lo que digan los señalamientos de
velocidad". Es de esperarse que los conductores
respeten y obedezcan las leyes. Definitivamente, nadie
debe poner en peligro la vida de otros manejando de manera
irres-ponsable.
Como se dice a menudo: manejar no es un derecho, es un
privilegio.
Aquellos que abusan del privilegio de manejar pueden
hacer que les suspendan la licencia.
Si su comportamiento afecta a otros, entonces el sistema
legal puede administrar castigos severos, desde multas
costosas hasta una sentencia en la cárcel.
Tal vez recuerdes el refrán que dice: "Si
no puedes pasar el tiempo en la cárcel no cometas
el crimen". Mi interpretación es: "Si
no tienes dinero para pagar la multa, entonces pórtate
bien y maneja adecuadamente".
En materia de integridad, ¿Quién podría
estar incu-rriendo en una violación? ¡Posiblemente
nadie!
Mi policía "consejero" me dijo que cuando
perciben que el flujo de tránsito vehicular es
seguro, pueden ofrecer un margen de tole-rancia.
Los reglamentos y leyes que ofrecen cierta flexibilidad,
con base en el autocontrol y el buen juicio, otorgan
a una comunidad madura el privilegio de la libertad,
aun detrás del volante.
Lo que también sabemos es que cuando la cortesía,
la seguridad y el buen juicio rigen los hábitos
de manejo (así como cualquier otra situación
en la vida diaria) entonces la confianza reemplaza los
rígidos reglamentos.
Así que, por ahora, joven y aprendiz conductor,
vigila tu propia velocidad, respeta la ley y mejora tus
habilidades para manejar.
Asegúrate de decirle a tu padre que estás
observando su forma de manejar y que sabes que es importante
la integridad, aún cuando la policía tal
vez no haya tenido el tiempo para infraccionarlo - por
ahora.
JIM BRACHER es el fundador del Centro
Bracher para la integridad de los líderes en Monterrey.
Su columna “Temas de integridad”, aparece
cada mes en El Sol. Los lideres pueden enviar sus preguntas
acerca de asuntos relacionados con grupos sociales y valores
al siguiente correo electrónico: newsroom@salinas.gannett.com
o a info@brachercenter.com.