Temas de Integridad
Junio 7 de 2008
¡Hay que vernos en el espejo!
Pregunta: (E-344)
Otro maestro fue arrestado, esta vez en una comunidad cercana, bajo sospecha de posesión de drogas. Otros a través de los Estados Unidos que trabajan en los salones de clases de nuestra nación han sido acusados y algunos convictos de violación, robo y una serie de crímenes que son una vergüenza para la honorable profesión de la educación.
A pesar de las excusas que ofrecen estos individuos carentes de toda moral, su fracaso a vivir de acuerdo con su contrato social es intolerable.
Los seres humanos están obligados a ser respetuosos y honestos. Se espera que cada día, muestren aptitudes apropiadas de desarrollo, incluyendo hábitos constructivos sociales y de lenguaje junto con habilidades de comportamiento que les permite hacer bien su trabajo. Individuos que interfieren con los más vulnerables miembros de la sociedad, nuestros jóvenes, son puestos a prueba de forma intensa, son retados de forma intensa a un alto estándar para honrar la confianza del público, manteniéndose por encima de los reproches. Los errores suceden, pero aparentemente las violaciones de integridad cultural, por parte de los educadores, les brinda a los miembros de la sociedad que se preocupan, razones para ponerse a pensar.
Los mismos maestros están indignados por aquellos que han roto la confianza del público. Pero, antes de condenar a aquellos que han sido "malos" ejemplos, sería positivo sacar un espejo y evaluar las hipocresías en nuestras vidas.
Para bien o para mal, todos predicamos con el ejemplo. Los educadores son responsables de vivir de acuerdo a las "demandas del trabajo" de guiar a otros, constructivamente. Definitivamente moldear valores positivos es esencial. Pero los errores suceden. Comportamientos descuidados y sin pensar afectan a la comunidad. Mejor aún, con respuestas meditadas y proactivas, la integridad de las relaciones personales y profesionales no se dañan permanentemente. Las disculpas sinceras junto con medidas correctivas tie-nen un gran impacto para solucionar problemas.
- Que bueno que aún reconocemos "comportamientos fuera de lugar" y estamos dispuestos a condenarlos:
- Líderes espirituales violando a personas jóvenes emocional y sexualmente
- Abogados que se sirven a sí mismos y se apropian de forma individual recursos de testamentos y última voluntad
- Contadores que a sabiendas establecen gestiones de transacciones financieras que evaden impuestos y dejan a sus clientes en problemas
- Profesionistas de la salud que practican mal la medicina, poniendo en riesgo vidas
- Engaño, mentira, trampa y crueldad de parte de servidores públicos y banqueros privados
¿Deben los maestros vender drogas o seducir alumnos? No. ¿Deben las personas en posición de poder, ya sea en casa, en público, en la mesa directiva o esfera política, avergonzar, devaluar o humillar a otros? ¡Por supuesto que no!
Conforme nuestra sociedad experimenta un incremento en el comporta-miento y el lenguaje grosero, nos atañe el recordar que nuestras palabras y nuestros actos tienen un impacto. Señalar las fallas de otros mientras que continuamente ignoramos nuestros comportamientos destructivos, no va a restablecer la integridad.
JIM BRACHER es el fundador del Centro
Bracher para la integridad de los líderes en Monterrey.
Su columna “Temas de integridad”, aparece
cada mes en El Sol. Los lideres pueden enviar sus preguntas
acerca de asuntos relacionados con grupos sociales y valores
al siguiente correo electrónico: newsroom@salinas.gannett.com
o a info@brachercenter.com.
